3 juegos para interesar a los niños y reforzar la seguridad en el agua

¡Los niños recuerdan más cuando se divierten!

Ludificación. Es una gran tendencia comercial en la actualidad. Lograr que la gente aprenda y participe permitiendo que la educación sea divertida y agregando un elemento de competencia. ¿Suena familiar? ¡Por supuesto que sí! Es la manera más exitosa de enseñar a los niños. Es la razón por la que un ámbito educativo como Plaza Sésamo, cuya entidad comercial se conoce como Sesame Workshop, generó $121.6 millones en ingresos en el 2016.

Hacer que el aprendizaje sea divertido transformándolo en un juego competitivo es una manera efectiva de enseñar a los niños a mantenerse más seguros cerca del agua. Este método toma conceptos y los convierte en formas agradables de aprender incorporándolos en la perspectiva del niño.

Estimular la atención

Edutopia, la fundación educativa establecida por George Lucas (sí, el creador de La guerra de las galaxias), señala que la actividad física ayuda a los estudiantes con déficit de atención a mantener la concentración. Las clases de natación tienen todo que ver con actividad física y, por lo tanto, exigen la atención de los niños.

La fundación promueve la importancia de enseñar a los niños el significado y la realidad de prestar atención. Cabe destacar que muchos conceptos de seguridad, tales como estar conscientes del entorno y prestar atención, son nuevos para las mentes jóvenes. Necesitan de ayuda para incorporar estas ideas en su visión del mundo.

Uno de los mensajes más importantes de esta fundación educativa se trata de la capacidad del niño para mantenerse centrado y atento. Esta varía de aproximadamente dos a cinco minutos por cada año de edad, lo que significa que, para la edad de seis años, el niño de promedio que está aprendiendo a nadar o mantenerse más seguro cerca del agua podrá concentrarse en esa información durante tan solo 12 a 30 minutos.

Mantener la diversión

Los niños que apenas están aprendiendo a nadar tienen varias cosas que compiten por su atención. Puede que todavía se estén acostumbrando a estar en el agua. Puede que contener el aliento y recordar las brazadas aún no se hayan convertido en costumbre. Su período limitado de concentración significa que fácilmente pueden frustrarse o distraerse.

Es por eso que es tan importante introducir un poco de diversión en el aprendizaje de natación y la práctica de seguridad en el agua. Aquí se presentan tres juegos de piscina comprobados que pueden ayudar:

1. ¿A quién no le encantaría ser Superman? Resulta fácil enseñar a los niños a sentirse a gusto en el agua cuando les explica que pueden planear, al igual que Superman, empujándose de la pared de la piscina con los pies. El ejercicio ayuda a enseñar el control de la respiración y la coordinación del cuerpo también.

2. Dar patadas para impulsarse con las brazadas puede resultar desafiante para algunos niños mientras aprenden a coordinar las extremidades. Ayúdeles relacionándolo con una versión acuática de “luz roja, luz verde”. Al oír “luz verde”, es tiempo de dar patadas e impulsarse tan rápidamente como puedan. Al oír “luz roja”, es tiempo de detenerse en donde estén y notar qué tan lejos han ido en comparación con los demás. El elemento importante de este ejercicio es la “luz amarilla”, que es la señal de dar patadas lentas, lo que ayuda a los niños a concentrarse en el movimiento del cuerpo y la coordinación de las extremidades. Puede ver esta actividad en nuestras clases del equipo de natación junior.

3. A algunos niños les puede resultar difícil hacer maniobras debajo del agua, por lo que se frustran y pierden interés por aprender a nadar. El truco es hacer que sea divertido introduciendo la ludificación y su elemento de competencia. Coloque objetos fáciles de agarrar en el fondo del extremo poco profundo de la piscina. El desafío será recuperar tantos como puedan. Anime a los niños a que trabajen en equipo. Esto les ayudará a comprender el concepto de cooperación. Observar a una pareja que ha dominado la natación debajo del agua puede ayudar al niño a aprender a hacerlo también.

Hacer que la educación en seguridad acuática sea agradable

Piense en su niñez. La vida estaba colmada de normas y reglas con consecuencias en caso de no seguirlas. Casi parecía como si el mundo fuera nada más que “no hagas esto” y “no hagas aquello”.

¿Con qué frecuencia un adulto dedicó un tiempo para explicarle, de tal manera que su mente joven pudiera comprenderlo, por qué era importante seguir esas reglas? Uno de los principales objetivos de la ludificación es ayudar a los niños a comprender la relevancia de lo que aprenden y lo que se espera que hagan.

Es fácil incorporar esta idea a la hora de enseñar a los niños a mantenerse más seguros cerca del agua. Solo recuerde convertirla en una historia relevante. Introdúzcale un porqué.

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